Margot Fleming: Legado y Pasión en el Ultrarunning, Siguiendo los Pasos de su Padre Thomas J. Fleming en el Mundo del Maratón

En el mundo del ultrarunning, la legendaria Margot Fleming se destaca no solo por sus propias proezas atléticas, sino también por su herencia familiar única. Hija de Thomas J. Fleming, bicampeón del Maratón de Nueva York en 1973 y 1975, y subcampeón del Maratón de Boston en 1973 y 1974, Margot ha seguido los pasos atléticos de su famoso padre y ha forjado su propio camino en el ultrarunning, compitiendo en distancias aún más largas que las de su padre.

Familia de corredores

Margot Fleming no solo heredó las habilidades de su padre, sino también las de su madre, una ultrarunner realizada en su propio derecho y varias veces entre las mejores corredoras femeninas de Comrades. Margot, nacida y criada en Glen Ridge, New Jersey, comenzó a correr a una edad temprana y ahora vive en Los Ángeles donde trabaja en marketing de experiencia de marca para Lululemon, una reconocida marca de ropa deportiva.

Hasta la fecha, ha completado más de 20 ultramarathones, algunos en carretera pero la mayoría en senderos. Sus distancias varían desde 100 millas hasta carreras de seis días que abarcan hasta 302 millas.

Un camino propio en el ultrarunning

Aunque su padre, un corredor sumamente competitivo y veloz, no entendía por qué alguien querría correr distancias más largas y "más lentas", Margot ha mantenido su amor por el ultrarunning. Ha logrado equilibrar su carrera de tiempo completo con su entrenamiento, aunque admite que no ha podido igualar el régimen de entrenamiento de su padre de 140 a 150 millas por semana, y hasta 200 millas en algunas semanas.

Margot ha competido en diversas partes del mundo, incluyendo Sudáfrica, Alemania, Marruecos y Dinamarca. En la infame Marathon des Sables en el Sahara, recuerda la camaradería con sus compañeros de tienda al final de cada día como la mejor parte de la carrera, a pesar del calor y la suciedad intensos.

Lecciones de carrera

Margot también ha aprendido lecciones valiosas en el camino, como la importancia de correr su propia carrera y no compararse con otros. Recuerda que su peor error en una carrera fue escuchar a corredores más experimentados y avanzados antes de su primer maratón. Estaba insuficientemente vestida en un día muy frío y no se movía lo suficientemente rápido para calentarse, lo que resultó en un día muy desafiante.

Visión de futuro

Mirando hacia el futuro, Margot planea seguir corriendo y espera estar compitiendo en Europa en una década, con viajes de fin de semana a Chamonix en su lista de deseos. También desea seguir honrando la memoria de su padre, tal vez con un tatuaje conmemorativo del Maratón de la Ciudad de Nueva York.

El legado de Margot Fleming es un testimonio inspirador de la tradición familiar, la dedicación al deporte y el amor por el ultrarunning. ¿La seguirás en su camino continuo de descubrimiento y logros en el ultrarunning? ¿O te inspirará para forjar tu propio camino en el mundo del deporte?